Al pensar en Alemania, lo primero que uno recuerda es aquel gran muro de hierro que dividió el país durante años, dejando una gran impronta en la historia no solo de los alemanes sino del mundo entero, pero Alemania es mucho más que el recuerdo de una muralla. Sus hermosas ciudades ofrecen opciones para todos los gustos Y hasta en el pueblo más pequeño del país se puede disfrutar de un paisaje y una vista inigualables, dignos de ser visitados y retratados.
Desde los Alpes al sur del país, pasando por las colinas de Alemania central hasta llegar a la costa del mar Báltico en el norte, Alemania ofrece un paisaje de cuento, con hermosos barrios antiguos, casas de la época medieval, iglesias góticas y pequeños vecindarios.
Alemania, en el centro de Europa, ofrece una gran variedad de destinos. Así nos encontramos con turismo urbano, de playa o de naturaleza, según las zonas.
En la zona norte está la capital, Berlín, que es una de las ciudades más visitadas del país, en gran parte por su importancia histórica, que ha dejado como atractivos turísticos los restos del Muro, la Puerta de Brandenburgo o el Museo de Checkpoint Charlie, pero también por ser una ciudad cultural y monumental. Otros lugares para visitar son la Alexanderplatz, el Reichstag, o el Rotes Rathaus, entre muchos otros.
En el norte están también Hamburgo y Hannover, conocidas por sus monumentos y por ser centro de negocios respectivamente.
Catedral de ColoniaEn el interior del país destacan Colonia, con una bonita catedral gótica, Patrimonio de la Humanidad, Düsseldorf, centro financiero con un atractivo casco antiguo y Bonn, que fue capital en tiempos de las dos Alemanias.
La zona de Baviera es muy conocida y una de las más turísticas de Alemania. La ciudad de mayor importancia es Munich, con una interesante parte antigua y con monumentos como la Iglesia de Nuestra Señora. Otras ciudades muy turísticas son Nuremberg, Ratisbona, Friburgo, Baden-Baden, Heidelberg o Regensburg.
En los alpes bávaros, cerca de la frontera con Austria, se encuentra el Castillo de Neuschwanstein.
Castillo de NeuschwansteinAdemás, cabe destacar la Selva Negra, un impresionante macizo montañoso poblado de abetos, muy aconsejable para turismo de naturaleza.